LA RECEPCIÓN CRETENSE

Al acabar la cena nos recogieron los autobuses que nos llevarían a la recepción oficial en la Academia Ortodoxa de Creta.

Allí nos prepararon un refrigerio y asistimos a un espectáculo de música tradicional Griega que hizo las delicias de todos y que nos animó a abarrotar el escenario hasta en cuatro ocasiones, ya lo sabemos… ¡Somos incorregibles! Siempre acabamos siendo los protagonistas de todas las fiestas. Pero en esta ocasión fue especialmente emotivo ver a deportistas de tantos países bailando, divirtiéndose y compartiendo momentos tan mágicos.

Al finalizar la recepción regresamos al hotel y nos acostamos muy cansados, pero con la convicción de que mañana nos daríamos un merecido chapuzón.

Anécdota del día: Souza se marcó un increíble baile al más puro estilo griego (recordad el anuncio de la colonia Andros) con una voluntaria.

Hoy aprovechamos para hacernos la primera foto de la delegación española al completo.